El plantel de Rosario Central no se encuentra solo en la ciudad brasileña de Fortaleza. Acompañados por una marea de hinchas canallas que llegaron con antelación, los jugadores recibieron un arrollador apoyo este martes por la tarde-noche cuando regresaron del último entrenamiento previo al trascendental partido de este miércoles, a las 19 horas.
La escena en la puerta del hotel donde Central hizo base fue un caos controlado de pasión y fervor. Centenares de hinchas se congregaron desde temprano, aguardando con ansiedad la llegada del plantel. A medida que los jugadores iban descendiendo del autobús, el ambiente se transformaba en una explosión de cánticos, abrazos y muestras de cariño, dificultando incluso el paso de los futbolistas por la marea humana que los rodeaba.
La conexión entre equipo e hinchada fue total. En medio de un clima de absoluta efervescencia, los canallas, que horas antes habían convertido las paradisíacas playas de Fortaleza en un verdadero carnaval, demostraron que su apoyo es incondicional. Cada jugador fue recibido como un héroe, en una atmósfera cargada de optimismo y entusiasmo por lo que está en juego.
A tan solo horas del crucial choque contra Fortaleza, la ilusión y el deseo de alcanzar los cuartos de final de la Copa Sudamericana se palpita en cada rincón de la ciudad. Central se siente respaldado por su gente, que con su aliento convierte este momento en una fiesta inolvidable, una que los jugadores llevarán consigo al campo de juego en busca de la ansiada clasificación.